Fiesta del Agua

WANSO QOCHA ANTABAMBA APURIMAC


El lugar denominado Wuanso Qocha , ubicado entre Palqa y Waytanqa, en la comunidad de Antabamba, hacia el este del la población es una represa grande de agua para riego, con la finalidad de cultivar cereales como maíz, trigo, cebada y también habas y arbejas, entre otros sustento fundamental para la alimentación del antabambino, pues el agua de Huanso Qocha abastece el riego de todo los parajes de cultivo denominados: Maras, Hamara, Aqreanta, Akullía, Waychu, Waytanqa, Antawayo, Qoya, Wanka y todo el paraje de Antabamba: Aqoycho, San Sebastian, Qaqapata, Qalapauro, Qompiña, Urpipukyo, Hukuña, Chaqerpata, Kuchiqocha, Chakillchaka, Chiwakuri, Lloqesaywa, Waqllía, Chuspi, Retamani, Qaqamarka, Patero, Pampapampa, Tomarenqa, etc., sin el agua de Wanso Qocha, no sería factible la actividad agrícola antabambina, de allí que el trabajo en la represa de Wanso Qocha, fuente inagotable de irrigación, ha sido y es un gran acontecimiento y fiesta tradicional, de júbilo y algarabía popular, es así que cada 15 de agosto de todo los años, el trabajo del estanque y los canales de irrigaciòn Qocha Faena y Yarqa Faena. Partiendo de una concepción mítica, filosófica y legendaria de que Wanso Gocha, es un gran personaje paradigma del antabambino, en lo que respecta a liderazgo, habilidad, creatividad, honestidad, para lograr con visión, metas y proyectos. Cuenta la leyenda entre otras cosas, que un gran caballero llamado don Juan Wanso, que personifica a la represa, con su esposa María Chanchalla, eran propietarios de grandes extensiones de tierras de cultivo y cantidades de ganado vacuno, precisamente, un 15 de agosto día del onomástico de don Juan Wanso, un ganadero cotahuasino quien había convenido en retornar para esa fecha a recoger sus reses, llegó exactamente al lugar donde concertaron el negocio; eso quiere decir que al llegar a Wanso Qocha y al no encontrar a don Juan Wanso interrogó a los presentes y ninguno manifestó conocer a don Juan por el contrario se realizaba una gran fiesta con la concentración multitudinaria de los antabambinos celebrando con corridas de toros el onomástico de don Juan Wanso. La Qocha Faena en los últimos años se ha convertido en una gran fiesta tradicional del pueblo antabambino, con tal motivo el Yaku Kamayuq, Unu Juez o Juez de Aguas es elegido en Asamblea Pública de la Comunidad juntamente que los Regidores de Aguas y el Obligado (responsable de la corrida de toros); Las autoridades y voluntarios previamente planifican este acontecimiento tradicional de Huanso ocha.

Los comuneros y pobladores, realizan ofrendas a la pacha mama 
El Juez de Aguas tiene la delicada e importante labor de distribuir el agua, para que el riego se haga en forma equitativa, ordenada y sin desperdicio de agua, cada paraje tiene un Juez, Wanka y Antabamba, estos funcionarios desde el momento de su nominación tienen una ardua labor, cumplen con todo los ritos tradicionales, en su domicilio preparan un ambiente adecuado para que el Cura (sabio conocedor de los ritos tradicionales y los cambios atmosféricos, cuando escasean las lluvias y por consiguiente las aguas, se dirigen a una laguna Ronto Qocha y con una honda especial con flores multicolores hondea hacia las límpidas aguas de la laguna para que los apus se conduelan del pueblo y derramen sus aguas) haga su Altar adornado con flores naturales traídas especialmente de las alturas donde se encuentran las fuentes de agua, en este ambiente se observa una cruz hecha de plantas y flores nativas, incienso, carbón, pichu wira (cebo de alpaca), maíz, molido de todo color, coca, chicha y licor , instrumentos diversos campanillas, sonajas, conchas, chuspas, etc., los jueces y su séquito trabajan todo el año, durante el mes de agosto la actividad se hace más intensa, las visitas y recorridos por los canales de irrigación y al reservorio son permanentes. Faltando tres días para el día central los jueces de agua se dirigen a la toma recorriendo en lo posible por el “camino del agua” (los canales), el reservorio, la toma y las fuentes de agua, hay lugares adecuados donde los jueces y sus numerosos acompañantes hacen un alto (descansan) para cumplir con los ritos, los protagonistas principales son los jueces y los curas, todo está acompañado por sendos vasos de chicha y copas de licor, las esposas de los jueces y acompañantes sirven exquisitas viandas, después de una lenta caminata amenizada por canciones que son himnos al agua pasan por el reservorio, luego Palqa, Chapicirka, Molloqo, Inkachuma, La Toma, Wamanripa, donde se establecen en lugares que, para los participantes y el pueblo son verdaderos templos, donde con mucha fe pronunciando oraciones y canciones todas con un contenido de vida y esperanza para que el agua no falte e irrigue los parajes que dan el sustento al poblador antabambino, así pasan la noche y días, siempre con mucho optimismo y fe, el segundo domingo de agosto que es el día central de La Qocha Faena, las caravanas de ambos jueces vistiendo su mejores galas típicas, ponchos de alpaca, sombreros de paño de oveja adornados con flores de las alturas, luciendo sus chalinas y chuspas multicolores con hermosos pallaes, las mujeres igualmente con llikllas, rebosas, blusas de seda, faldas de maranganí multicolores, retornan por el camino del agua con dirección al reservorio, juntamente con el agua siempre cumpliendo con todo los ritos, la caravana llegará una vez que la represa esté debidamente limpia. Mientras esto ocurre, toda la población se moviliza desde la madrugada, la mayoría con lampas al hombro para el champeo, unos a pie otros a caballo, las mujeres con llikllas para cargar las champas, también toda la gente de las parcialidades, caseríos, cabañas de las más altas latitudes de los cuatro puntos cardinales, se congrega en el perímetro de la represa y en las explanadas aledañas, la labor se inicia aproximadamente a las nueve de la mañana ,previamente las palabras del Presidente de la Junta de Regantes y de alguna autoridad, los Jefes de Cuadrillas hacen el control de los asistentes, igualmente al final de la jornada, el trabajo que es intenso y arduo, concluye a las tres de la tarde, todos se sirven sus viandas y bebidas, luego la multitud se pone inquieta y alegre por que los jueces de agua juntamente que el líquido vital hacen su ingreso al reservorio que al son de canciones, el agua fluye lleno de flores arrastrando en su caudal un atado de alimentos envueltos en una lliklla llena de colores y payase especialmente tejida para este acontecimiento, acto que se ensalza con saumerios de incienso, y la tinka con chicha, aguardiente y coca ,toda la multitud con mucha alegría entona las canciones y los característicos guapeos varoniles de: “¡wahu, chihu, wahu!”. El programa continua con la corrida de toros amenizada con banda de guerra y eventuales capeadores, mientras tanto, los jueces de agua, ocupan explanadas donde sus parientes y amistades le brindan sendas fuentes de picantes con cuyes, que generalmente pasan el centenar de fuentes, y luego servidos a todo los concurrentes.


El poblador que no tiene sombrero,
 los encargados del ritual les
colocan un sombrero de bosta
 de vaca, y de esa manera puedan ofrendar,
segun las costumbres
El Juez de aguas durante toda la ceremonia solamente silva y las mujeres entonan las canciones el Juez y sus acompañantes varones después de cada canción repiten ¡Wahu, chihu, wahu. En tanto la gente disfruta de la comida, una joven simpática y sobre todo atlética representa a cada Juez y compiten en carrera de velocidad principalmente por el curso del agua hacia la población hasta un lugar llamado Saqwanka cerca de la ciudad, que es la meta, según la creencia popular, el paraje que gane la competencia concluirá pronto el riego y sin mayores dificultades.

Los jueces de agua retornan a sus domicilios acompañados por sus familiares y amistades por el borde de la acequia y el cauce bullanguero del agua que acompaña las dulces melodías que entonan las cantarinas, los silbidos varoniles y los ¡Wahu, chihu, wahu!.

Y así concluye una de las más altas expresiones de trabajo del pueblo antabambino, que como siempre lo hace el campesino, con desbordante alegría.

Las canciones entonadas en homenaje a Wanso Qocha que son loas al agua entre otras mencionamos:


A WANSO QOCHA TRADUCCION AL ESPAÑOL

Momentos en que sueltan el agua
Chalancerellaq weqellanta taytallay señorllay Las lágrimas de chalancere ¡Padre mío, señor mío!

Orqoqochallaq llawarllanta La sangre de Orqoqocha

Apayamuchani taytallay señorllay Trayendo estoy ¡Padre mío, señor mío!.

Chaupitutallaq sonqochallampi taytallay señollay En el corazón de media noche,

Incachumallay estadomantat taqaramurani ¡Padre mío, señor mío!!.

Llullaramurani De Inkachuma, su lugar de origen, con mucho amor la he separado.

Wanso Qochallay taytallanmanta llullaramurqani De su padre Wanso Qocha, lo he atraído con gran cariño.

Maria Chanchallay mamallanmanta taqaramrqani De su madre María Chanchalla, la he separado.

Taytallay señorllay ¡Padre mío, señor mío!

Pitusirallay llanlarichiqlla taytallay señorllay Al que hace germinar el maíz ¡Padre mío, señor mío!

Sawasirallay fanchirichiqlla taytallay señorllay Al que hace florecer las habas ¡Padre mío, señor mío!

Qasqu saralla tarpuy munaqlla taytatallay señorllay Para el que gusta cultivar blanco maíz ¡Padre mío, señor mío!

Qello saralla kutuy munaqlla taytallay señorllay Para el que gusta masticar maíz amarillo

¡Padre mío, señor mío!

En Huanso en la tarde se raliza la corrida de toros,
adornados de jalmas, platos y espejos
Oqe saralla mihuy munaqlla taytallay señorllay Para el que gusta comer maíz gris ¡Padre mío, señor mío!

Chullpi saralla hankay munaqlla taytallay señorllay. Para el que gusta tostar maíz chullpi ¡Padre mío, señor mío!

Al recordar las tradicional Qocha Faena un fraterno saludos y reconocimiento a todos los jueces de agua de todos los tiempos.


Prof. BLANCA FÉLIX PINARES

Publicado en la Revista EL MARIATEGUIANO: Octubre de 2007.